Se trata, más bien, de un parche magnético que se adhiere al cuerpo y hace que la función de vibración del teléfono se anule y al mismo tiempo se active un impulso dirigido al área donde está colocado el “tatuaje”. Les debo que sé que nos importan como el color, tamaño o costo de semejante adminículo pues la verdad, dicha sea de paso, es que aún no existe. La finlandesa simplemente se imaginó algo y corrió a ser la primera en contarlo, “no vaya a ser que…”
En la mente de Nokia, este “tatuaje” electrónico no necesita enchufarse de nadie ni recibe alimentación de ninguna fuente, pues su funcionamiento dependería del magnético establecido entre él y el teléfono. La imaginación alcanza para pensar en tatuarlo directamente en la piel para lograr una vibración tan sutil que sea silenciosa la mismo tiempo que efectiva y con un vínculo tan fuerte entre el terminal y el tatuaje, que la función prevalezca incluso si el móvil está un poco lejos, por ejemplo, dentro del bolso.
¿Puro desvarío? No tanto. Algunos experimentos pueden funcionar como un alentador precedente. Por ejemplo, un reportaje de Wired en el 2006 acerca de personas que habían implantado un imán en la punta de su dedo anular, para llevar sensaciones al cerebro al entrar en la zona de un campo magnético. De igual modo, en la Universidad de Illinois estarían experimentando con materiales adhesivos a la piel para integrar circuitos electrónicos que brinden asistencia a medidores de signos vitales y otros equipos con uso médico.
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En fin, que la pretensión de Nokia es que el tatuaje sea capaz de comunicar distintos estímulos según lo que ocurra en el móvil: llamadas, mensajes de texto o correos electrónicos se sentirían diferentes entre sí. Otra aspiración de la finlandesa es que el “truco” esté en la composición de la tinta: hecha con elementos ferromagnéticos, funcionaría con cualquier diseño, así que el usuario no tendría que usar un tatuaje con forma de chip ni nada por el estilo.
La curiosidad que esto produce deja, por supuesto, espacio para muchas dudas. Por ejemplo, si todo funciona gracias a campos magnéticos, ¿cómo se podría controlar que la vibración ocurra únicamente con tu móvil y no que se active por error si otro móvil igual repica en un radio muy cercano? ¿Cómo funcionaría un equipo así en pacientes con marcapasos? ¿Tendría algún problema el portador de uno de estos “tatuajes” para pasar por controles de seguridad y otros detectores de códigos y metales?
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